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La FSAR de España, comprometida a tomar la vida en sus manos

Más de 70 seglares agustinos recoletos participaron en el VIII Encuentro nacional que tuvo lugar en Madrid con el lema «Toma la vida en tus manos». El Prior general compartió y presidió la eucaristía de clausura en la que les pidió ser «creadores de comunión» en sus familias y sus entornos

Tomar la vida en las propias manos es un reto para cualquier persona. Desde este fin de semana es un desafío más para la Fraternidad Seglar Agustino Recoleta (FSAR) de España. Del 5 al 7 de octubre, todas las comunidades del país se dieron cita en el VIII Encuentro nacional que tuvo lugar en Madrid. Los seglares agustinos recoletos compartieron experiencias y testimonios en tres días de comunión en la que reflexionaron acerca de su papel en la sociedad y su labor como Iglesia bajo el lema «Toma la vida en tus manos».

El encuentro nacional concluyó con la asamblea en la que fue elegido el presidente y los consejeros. Antonio Larios fue reelegido presidente de la FSAR de España, cargo que venía desempeñando desde 2015. Asimismo, por primera vez la asamblea eligió a dos consejeros, ya que se hizo efectiva en este órgano la unión de provincias Santo Tomás de Villanueva y San José que se efectuará en los próximos días. Los tres seglares elegidos conformarán el Consejo nacional, que a su vez decidió quién otorgará los puestos de secretario, tesorero y responsable de formación. «Es el encuentro nacional en el que se reúnen todas las fraternidades de España para convivir y ponerse en sintonía», indica Antonio Larios.

«Tomar la vida en tus manos» es una expresión que puede entenderse desde distintos puntos de vista. El asistente interprovincial de la FSAR en España, el agustino recoleto Miguel Ángel Hernández, aportó la visión que desde el carisma agustino recoleto se debe realizar a este lema. Fue complementada de manera perfecta por el testimonio Maricela Valles, seglar agustino recoleta de Venezuela, quien relató en primera persona la situación que miles de venezolanos sufren diariamente.

 

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El Prior general de la Orden de Agustinos Recoletos, Miguel Miró, y la Superiora general de las Misioneras Agustinas Recoletas, Nieves Mari Castro, acompañaron a los miembros de la Fraternidad Seglar en la mañana del domingo, junto a los priores provinciales de Santo Tomás de Villanueva y San José, el Vicario general, José Ramón Pérez, y el Vicario provincial de Nuestra Señora de la Candelaria.

El lema propuesto significa, para Miguel Miró, «responder a la llamada del Señor con confianza y con libertad». El mejor resumen es «dejarnos en las manos de Dios»; así se toma realmente la vida en las propias manos. El Prior general presidió la eucaristía de clausura del encuentro en la que pidió a los presentes dejar «que Dios moldee nuestra vida, nuestra familia y nuestra familia espiritual» y ser creadores de comunión con humildad.

Para la Superiora general de las MAR, «tomar la vida en tus manos» es «un llamado muy fuerte al encuentro consigo mismo y con Dios, proyectado en la vida de comunión». Es en resumen el fin de la fraternidad: «un compromiso de vida en comunidad, lo que responde a nuestro sentir cristiano».

«El carisma agustino recoleto es de la Iglesia y es vivido por los religiosos y religiosas, pero también los seglares se siente interpelados y motivados, y quieren vivir esta experiencia espiritual de San Agustín», dice Miró sobre la Fraternidad Seglar. Es algo compartido también por el presidente de la FSAR: «Sin tener un hábito ni una insignia, cuando nos vean que digan ‘ahí va un agustino recoleto'».

La FSAR elaboró varias conclusiones del encuentro nacional. Entre ellas, la necesidad de evaluarse con más frecuencia, la importancia de ser apóstol y estar disponible a la llamada de la Iglesia, o el dar testimonio de la identidad agustino recoleta. Para Carlos María Domínguez, Prior provincial de Santo Tomás de Villanueva, el reto está en «tender puentes con las JAR -Jóvenes Agustinos Recoletos- para que, cuando dejen de ser jóvenes, puedan pasar a la Fraternidad Seglar».