En este lugar emblemático, cuna de la Recolección americana, se han reunido 31 religiosos, todos ellos dedicados a las tareas formativas, y procedentes de Argentina, Brasil, Colombia, Costa Rica, España, Filipinas, Guatemala, México, Perú y Venezuela, países donde la Orden tiene casas de formación. Actualmente son 25 las casas, en ellas se forman unos 370 jóvenes que han iniciado el camino vocacional agustino recoleto.
Itinerario Formativo Agustino Recoleto (IFAR)
El Itinerario Formativo Agustino Recoleto (IFAR) ha centrado la temática, la reflexión y los trabajos de este encuentro, organizado por el Secretariado General de Formación. El IFAR es una pedagogía, una “sabiduría”, un estilo de formación, que ayudará a nuestros formandos a configurarse con Cristo según el carisma de la Orden y a asumir sus sentimientos, a hacer propio el camino agustino recoleto, a convertir en sangre de su sangre el caminar existencial de san Agustín y la pasión renovada de la Recolección.
Fr. Carlos González ha dirigido y coordinado las exposiciones y los talleres del encuentro; con él han colaborado Fr. Javier Goizueta y Fr. Rafael Mediavilla. Fr. Ángel Jahir Córdoba se ha preocupado con esmero y detalle de la parte logística. Los participantes han podido conocer mejor este nuevo estilo o pedagogía de formación IFAR, la antropología agustiniana que lo sustenta, sus líneas de fuerza y objetivos, los medios y los instrumentos: los retiros, los ejercicios espirituales, la semana de formación, los talleres, las fichas, el acompañamiento personal y comunitario, el trabajo en equipo de los formadores.
Formar en clave IFAR
El encuentro ha motivado a los formadores en la tarea de formar en clave de IFAR, les ha hecho ver sus ventajas y sus exigencias, y les ha facilitado herramientas pedagógicas para puesta en marcha. Se han precisado mejor los objetivos de cada etapa formativa, se han compartido las experiencias, los logros y las dificultades, se han determinado y estructurado los instrumentos o medios para garantizar la formación inicial desde el carisma, se han revisado y corregido los materiales existentes, y se ha impulsado la elaboración de los materiales que faltaban en las etapas de noviciado y profesión simple y solemne. Han sido unas jornadas de trabajo intensas, pero desde la convivencia fraterna y la cálida acogida de la provincia de La Candelaria y de la comunidad de El Desierto, hemos experimentado en todo momento la alegría de vivir y trabajar unidos.